Lo único difícil del guiso de lentejas es acordarse de remojarlas una noche antes, luego la receta es muy fácil. Las lentejas son unas legumbres altamente nutritivas, que aportan el vital hierro para la inteligencia. Son un plato ideal para el invierno por su aporte calórico.
Enjuagar las lentejas remojadas y dejar escurrir. Picar una cebolla, y cuatro dientes grandes de ajo. Rehogar la cebolla picada primero en abundante aceite de oliva (o el que haya) a fuego lento en una olla mediana/grande. Luego de unos quince minutos agregar el ajo picado fino. Agregar varias hojas de laurel. Luego de otros 5 minutos agregar abundante puré de tomate, y mezclarlo bien. Luego agregar las lentejas y cocinar a fuego lento (revolviendo a cada rato para que no se quemen las lentejas del fondo de la olla). Si se seca agregar caldo hecho con un cubito de carne o verdura, y/o vino tinto. Agregar sal y pimienta hasta que esté a gusto.
Algunas variaciones:
1)Mas proteína: agregarle panceta (tocino/bacon) picada en trozos pequeños, y/o chorizo al momento de agregar la cebolla para que se frian juntos
2)Mas verduras: agregarle pimiento morrón, zanahoria, para en cubos chicos y hasta porro (poro) junto a la cebolla
3)Con vino: agregar dos copas de vino junto a las lentejas, subir el fuego hasta que evapore un poco
4)Picante: agregarle 4-5 chiles morilla o de árbol secos
Aclaración: este blog no se hace responsables por los efectos secundarios sonoros y aromáticos de quienes coman este platillo